Esta pestaña la voy a utilizar para explicar los tres ámbitos de intervención que mi grupo y yo hemos escogido adjuntando una presentación multimedia hecha con la aplicación MINDOMO:
Make your own mind maps with Mindomo.
Hemos decidido escoger tres ámbitos de intervención social del educador o educadora social, son los que nos han parecido de mayor relevancia en la actualidad, estos son; drogodependencia, problemas en infancia, adolescencia y juventud y la violencia de género. Para explicar cada ámbito, hemos elegido uno o dos vídeos breves acompañados de un comentario.
Conocemos por drogodependencia el uso frecuente de sustancias adictivas (drogas), es muy común en la sociedad actual aunque se ha venido reduciendo desde los años sesenta. Esta disminución del consumo de drogas se ha producido gracias al reparto y acceso a gran cantidad de información sobre los nocivos efectos de los estupefacientes y por el mayor control del Estado sobre estas actividades ilegales. La drogodependencia comienza a ser una enfermedad que ataca cada vez en mayor proporción a la población joven. Muchísimos adolescentes consumen y venden grandes dosis de droga, esta práctica ilícita suele acabar con el acceso de los jóvenes en Centros de menores internos.
En los Centros de Menores encontramos a jóvenes con problemas en su vida cotidiana que desembocan en la desviación de su comportamiento y en el fracaso escolar, comportamientos como robos, consumo o venta de estupefacientes, violencia, desorden público, etc. La edad en la que los jóvenes suelen comenzar a generar situaciones conflictivas suelen ser los doce o trece años, lo que se pretende al internarlos en los “reformatorios” es su reeducación para, posteriormente, reinsertarlos en la sociedad. Otras de las funciones de los Centros es la de acogida y protección de los menores, cubrir las necesidades básicas y cuidados de las necesidades físicas y psíquicas.
En cuanto al colectivo de mujeres víctimas de la violencia de género, en la actualidad el número de maltratos es mucho menor que el de principios de siglo, pues el Gobierno ha tomado medidas de prevención como la Ley Integral de violencia de Género, el teléfono gratuito y confidencial para mujeres maltratadas 061, etc. La mayoría de la sociedad se ve muy comprometida en este asunto y parece no tolerar estos comportamientos machistas e inhumanos que, desgraciadamente, tienen algunos hombres hacia sus parejas o exparejas. Esta conciencia social se va extendiendo poco a poco a las mujeres afectadas, el número de denuncias aumenta a la par que se reducen los casos de violencia. Aunque todavía hay mucho que hacer en este delicado ámbito.
La labor del educador o educadora social será la de apoyar y proteger a las personas que se encuentren en algunas de las situaciones anteriores, e intentar su reinserción en la sociedad. Deberán hacerles saber que todos los problemas tienen solución y enseñarles cual podría ser el camino correcto para salir de la situación desfavorable en la que se encuentran.
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